Daños

La calle siempre es mas angosta
desde mi ventana

mirando a lo lejos por si acaso
(...)

Dulces tintes de oscuridades que se posan
calládamente sobre un recovejo
de la angustia,

y una ansiedad impuesta por el
cigarrillo blanco

no hay nada que hacer
ante esos gemidos dolorosos del
pecho que se cansó de implorar
por un momento de sensaciones
ya no quiere llorar.

Sentando la esperanza sobre verdes
pastos creciendo a lo largo de
la avenida principal en mi cerebro
siempre es fácil comprender

pero un tan difícil hacer a la idea
que de nuevo

me quedé en el camino
en pausa

sin poder agitar mi alma y lanzar
lo que adentro daña.

Perla JM